Bienvenidos compañeros al segmento musical del Rincón. Como todos los años, hacen acto
de aparición los TOP 7 de fin de año. Este año, en particular ha sido un año
repleto de discos que mes por mes inundaron las oficinas sonoras del ministerio
de música de Tabao. Fiel a mi tradición de un disco y un comic cada dos o tres
días, digamos que ha sido un año bastante cargadito. En este primer TOP (el próximo
será de comics por supuesto) van los mejores discos del ciclo 2014, los peores
y los masomenos según por supuesto, mi cortante y efímera opinión.
ADVERTENCIA:
Todas las opiniones que podrían haberse tenido en cuenta fueron dejadas de
lado, para escribir solamente lo que a mí me gusta. Por ende, este es un TOP
personal, que no está limitado a nada. Lo animo a hacer el suyo propio.
PREMIOS “BLERG! 2014”
Porque a pesar de haber buenos discos cada año, también hay
porquerías que los compensan.
3. PIXIES – INDIE CINDY
Al final de cuentas y después de mucho pensarlo (y
escucharlo por supuesto) llegué a la conclusión de que el último disco de la
banda comandada por el gordo Francis es un fiasco. Ni siquiera es un disco hecho
y derecho, sino un mejunje de 3 Ep´s que sacaron en el año (uno peor que otro).
Tema a destacar “Bagboy” por el esfuerzo nomás.
2. KASABIAN – 48:13
Ya la total falta de creatividad en el nombre y portada del
disco hacen intuir que no nos espera nada bueno en su escucha. Sinceramente los
Kasabian nunca han sido una gran banda, pero es de admitir que han sabido tener
sus momentos inspirados (mal que me pese, “Velociraptor!” No estaba tan mal).
Esta no fue la ocasión. Aburrido, repetitivo y sin ningún tema que destacar.
1. PINK FLOYD – THE ENDLESS
RIVER
Tampoco era que esperara el gran disco de regreso de estos
muchachos, pero con una carrera tan intensa y unos buenos pares de discos en su
haber, seguramente esperaba algo más. Al igual que “13” de Black Sabbath el año
anterior, “The Endless River” es un disco completamente innecesario.
Aburridísimo, denso y sobre todo molesto, dice Pink Floyd en el título pero es
como si estuvieran en piloto automático. Ambient y más Ambient, quizá ya estén viejos
para nosotros, quizá no estaban inspirados o quizá simplemente es un disco de
descartes de hace veintitantos años. La última opción me parece la correcta.
PREMIOS “¿DEBERÍA
DARLE UNA OPORTUNIDAD?”
El espacio para aquellos discos que todavía no decido si son
una basura o un gran trabajo que estoy dejando de lado.
2. THE RAVEONETTES –
PE’AHÍ
El nuevo disco de The Raveonettes tenía toda la pinta de ser
uno de los más importantes del año pero por alguna razón no me terminó de
cerrar tras varias escuchas. En este álbum el dúo danés le da una engrasada más
a la maquinaria de su sonido y eso se hace sentir en cada tema del álbum. Ya no
hay estribillos pegadizos y repetitivos, las canciones son más interesantes que
en “Observator” y hay muchísimo más ruido y distorsión que antes. Sin embargo,
es un disco fácil, atractivo pero en el que no hay muchos hits como en los
anteriores. No sé, quizá esté renegando al pedo pero creo que con “Pe’ahí” me
pasa como con “Reflektor”de Arcade Fire, no me decido si es el disco que le
hacía falta a la banda o el que le sobra. Eso sí, a agendar los primeros tres
temas, que son buenísimos.
1. FOO FIGHTERS – SONIC
HIGHWAYS
Con algunas bandas renegamos cuando sacan un nuevo álbum y
es totalmente diferente a lo anterior y eso no sé si esta bueno. No sé si
deberíamos crucificar a la banda por probar caminos estilísticos nuevos, puesto
que es un paso necesario en sus carreras, por más que no nos guste, significa
una evolución a tener en cuenta. Bien, con el nuevo disco de Dave Grohl y sus
amigos sucede todo lo contrario, es un disco exactamente igual a todo lo
anterior, no hay grandes cambios ni pruebas, ni esfuerzos: son los Foo Fighters
haciendo lo que hacen los Foo Fighters y nada más. Grohl utiliza la excusa de
hacer un viaje por los estudios más representativos de E.E.U.U. para grabar un
documental de “cómo hacer un disco a lo Foo Fighters” y de yapa, grabar el
disco. Es un disco que sigue perfectamente la línea marcada por los anteriores,
pero que utilizando esa regla, tampoco está mal. Cito a los AC/DC por ejemplo
que este año han sacado nuevo disco y es exactamente igual a todo lo que venían
haciendo ¿Pero está mal? Sus fanáticos se lo agradecen y seguramente compraran
el cd ¿Por qué no podría ser lo mismo en el caso de Foo Fighters? No es un mal
disco, no quita ni agrega nada más, es en todo caso uno más en su carrera.
Quizá esperaba algo mejor después del genial “Wasting Light”
MENCIONES HONORÍFICAS
Aquellos discos que por A o por B no llegaron al TOP 7 pero
que de todas formas habría que tener en cuenta.
10. VARIOS ARTISTAS –
A PSYCH TRIBUTE TO THE DOORS
Acá hay un poco de trampa, The Doors es una de mis bandas
favoritas y siempre es bien recibido cualquier lavada de cara a su
interesantísima discografía. En este disco las versiones de las canciones tal
como reza el título del disco están regurgitadas mediante el Psych y bandas tan
buenas y representativas (y diferentes) como Elephant Stone, The Black Angels, Psychic
Ills, Dark Horses, Camera, Dead Meadow, Sons of Hippies, Dead Skeletons, Wall
of Death, Clinic, VietNam, Geri X y The Raveonettes. Otra trampa, muchas de estas
bandas me gustan un montón. En fin, un disco muy lindo y con versiones tan
distintas que finalmente cumple su función, pegarte un viaje con el cadáver de The
Doors. Buena suerte.
9. THE MEN – TOMORROW
HITS
A estas alturas The Men ya son una banda a tener en cuenta.
Y pareciera que sin quererlo. Se han ido ganando el espacio a base de discos en
los que se nota una constante evolución, pero en los que se nota que The Men
siguen siendo los mismos de siempre, como si para grabar cada álbum sólo les
hiciera falta juntarse en la casa de alguno con un par de cervezas en mano. Y
eso está muy bueno. Nosotros les agradecemos aunque no lo quieran, porque este
es sin duda uno de los mejores discos de los muchachos, un auténtico disco de
Rock (pasando por el Country y algo más). Entretenido y al ángulo.
8. ANTEMASQUE –
ANTEMASQUE
Sinceramente nunca he sido un gran fanático de The Mars
Volta. Pero este disco (en el que participan los mismos muchachos, con el
agregado de un batero y Flea tocando el bajo por ahí) poco tiene que ver con el
anterior trabajo de Omar Rodríguez-López y Cedric Bixler-Zavala. Este disco es como
si se hubieran juntado (después de la separación de The Mars Volta) solamente
para hinchar las pelotas en el estudio del bajista de Red Hot Chili Peppers. Me
los imagino en una conversación onda “Ya que estamos ¿No querés que grabemos un
disco?” – “Dale, pero que no tenga nada que ver con The Mars Volta” – “Yo
quiero hacer un disco más rockerito” – “Si, buena onda y preguntale a Flea si se
prende” En conclusión, alto disco.
TOP 7
7. BLUES PILLS –
BLUES PILLS
Oh sí. Blues Pills es como si Kadavar se hubiese juntado con
la Stevie Nicks de hace 30 años. En varios lados leí que muchos han juzgado el
disco debut de la banda por no ser tan bueno como prometía en principio. Esto
se debe a que los temas recopilados en los singles y ep’s de Blues Pills no
fueron respetados tal cual para la grabación del disco y entonces bajaron un
cacho su calidad en comparación a cómo fueron producidos originalmente. Pero
siendo sincero, eso no importa mucho en la escucha del disco entero. Quizá
“Gypsy” no es lo mismo, pero “Devil Man” está bastante bien. Al margen, es un
disco rockero con un claro sonido setentoso (el único revival que tiene que
seguir por Jebús) poderoso y muy, muy entretenido. Y lo mejor sin duda entre
todos esos solos potentes es la increíble voz de Elin Larsson, que para colmo
está bastante buena.
Momentos Embolantes: Los
últimos cuatro temas del disco, que flojean en comparación a los primeros, pero
sobre todo “Gypsy” porque la hicieron mierda.
Momentos Épicos:
Sin duda el trío “High Class Woman”, “Ain’t No Change” y “Jupiter” que son como
una piña tras otra en la nuca.
6. THURSTON MOORE –
THE BEST DAY
El primer candidato de los del año pasado que regresa a
ocupar un lugar en la lista no podía ser otro que nuestro amado tío Thurston.
Quizá no esté más arriba en el lista por algunos detalles, pero el nuevo disco
en solitario de Moore es un cañonazo propio de él.
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| La Tapa del Single de The Best Day es buenísima, saber que el tío Thurston ya era el tío Thurston desde chico no le gana a nada. |
En este disco junto a algún par de amigos para que le den
una mano (entre los que contó por ejemplo con Steve Shelley, su ex compañero de
Sonic Youth) y se calzó al hombro un disco de 50 minutos repartido en 8 temas. Riffs
gancheros, distorsión y la voz del tío a pleno ¿Qué más se puede pedir? Estoy
empezando a pensar que Moore saca estas joyitas de la galera justo cuando hace
falta, como para que no haya discusión y todo el mundo se quede escuchándolo
con la boca abierta un rato importante, como debe ser.
Momentos Épicos: “The
Best Day” está muy buena, “Forevermore” también, pero “Speak To the Wild” es la
posta-posta.
5. TEMPLES – SUN STRUCTURES
5. TEMPLES – SUN STRUCTURES
Probablemente a estas alturas del año ya los encuentre medio
fastidiosos a los Temples, por haberlos escuchado tanto y por todo el revuelo
que levantaron, por el que pasaron de ser una banda revelación a una banda que
estiró el chicle lo más que pudo, y no está mal pero no era necesario un disco
de remixes si recién están levantando vuelo. En fin, fue uno de los primeros
discos que destripé este año y no era para menos, el álbum debut del cuarteto
inglés es para tener en cuenta y no solo por su cantidad de hits, sino por su
cuidada y prolija revisión de la psicodelia y flower power sesentoso. La
psicodelia y los revisionismos se pusieron de moda hace unos años con algunos
discos interesantes y otros que sinceramente dan pena. El de Temples es un
disco que está un escalón más allá, es un muy buen disco. Tiene un inicio
potente y genial y termina de una manera bastante acertada. Lo que falla en
este disco son algunos temas del final, pero no porque sean menores en cuanto a
calidad en el disco conjunto, sino porque los esquemas se repiten un poco en
comparación a los primeros temas. A rescatar “The Guesser” y “Test of Time”
entre ese mejunje del final.
En definitiva un muy buen disco, disfrutable y lisérgico.
Apto para escuchar drogado y feliz de la vida.
Momentos Embolantes:
“A Question Isn't Answered”, “Sand Dance” y “Fragment's Light” que como ya
mencioné son un poco repetitivos.
Momentos Épicos:
“Move With the Season”, “Colours to Life” y “The Guesser”.
4. TY SEGALL –
MANIPULATOR
“Hola ¿Podría interrumpirlo unos minutos nada más? es para
hablarle acerca de nuestro mesías Ty Segall y sus discos”
Oh, si nuestro líder, el jovenzuelo Ty está otra vez de
vuelta (¿Acaso se fue alguna vez?) y esta vez en el formato que más cómodo le
queda: el de la Ty Segall Band, el del garaje. Y si, este disco es Ty Segall en
estado líquido al 100% y por eso, insisto, este es su lugar cómodo, su trono,
su espacio desde dónde hace lo que mejor sabe hacer. Quizá sea el único
problema de este disco, es un “disco de Ty”, no hay muchas sorpresas, es lo que
esperábamos y eso está muy bien. Pero, yo soy de los que creen que el gran
disco de nuestro mesías aún está por salir y por eso a pesar de todo, sigue sin
poder llegar a disco del año en mi lista. Es un disco que se disfruta de punta
a punta, quizá la sobreproducción de Segall, sin quererlo hace que haya algunos
temas de sobra (son 17 canciones) pero ojo, las que sobran tampoco están tan
mal, sólo son demasiados temas de una sola pasada. Este disco además contiene
el que sin duda es el mejor tema de Ty y el que sin duda para mí es el tema del
año: “Feel”.
Momentos Embolantes:
Muchas canciones, las del final sobre todo (Después de “Don't You Want To Know
(Sue)”) sobran un poco.
Momentos Épicos:
El tándem The Singer- It’s Over – Feel – The Faker – The Clock.
3. PURLING HISS –
WEIRDON
Saluden amigos, a mi nueva banda favorita. Esta banda es
definitivamente la banda que le hacía falta al rock de guitarras: un mejunje de
Dinosaur Jr. Y Neil Young regurgitado por Mike Polizze. El año pasado “Water on
Mars” quedó en segundo lugar, sólo porque no era mejor (para mí) al de QOTSA.
Este año pasa algo similar, el nuevo disco de Polizze y compañía es casi tan
bueno como lo es el anterior pero no mejor a los de los dos primeros puestos.
El año pasado afirmé que si se ponían las pilas este disco
iba a ser muchísimo mejor. No paso tan así. En este caso paso algo similar a Ty
Segall, es “el disco nuevo de Purling Hiss” pero nada más, no hay muchas
sorpresas siguen con la onda del disco anterior y eso está requetebién. También
al igual que Ty, sé que a Purling Hiss le falta un cacho todavía para sacar su
mejor álbum. Pero con este disco, definitivamente me han comprado y son una
banda de la que de ahora en más puedo dar fe, no quitaré oído. Yo se lo
recomiendo, señora.
Momentos Embolantes:
“Running Through My Dreams” es embolante y además está medio metida con chicle.
Momentos Épicos: “Forcefield
of Solicitude” es impecable, es de esas canciones que te quedas tarareando como
tonto durante todo el día. Pero sin duda el trío “Aging Faces”, “I Don’t Wanna
Be A…” y “Airwaves” son los temas que te gradúan de muñequito mueve-cabeza.
2. WOODS – WITH LIGHT
AND WITH LOVE
Este es un disco hermoso y disfrutable al 299%. Para quienes
no estén familiarizados con Woods les comento que esta banda en poco más de
nueve años y unos ocho discos en su haber han sabido ganarse el corazón (es la
mejor manera de decirlo) de un público que a esta altura ya es incondicional. La
banda de Jeremy Earl (dueño y productor del sello Woodsist, algo así como el
Phil Spector del garage-folk rock yanqui) tiraba más para el lado
garage-rock-pop en sus primeros discos y a medida que fueron creciendo,
cediendo el paso hacia el folk y la psicodelia sesentera.
Este es el disco más folk de Woods y en ese sentido, creo
que han dado en el ángulo porque es también el disco perfecto de la banda, el
mejor sin duda. Los ratos de cuelgue y guitarras un poco más ásperas de Bend
Beyond (2012, otro buen disco) quedaron atrás dando todo el espacio a un sonido
mucho más limpito, tranqui y con algún que otro pedazo intenso de psicodelia
sesentosa. Todo está bien y en orden en este disco. Las canciones están
compuestas y armadas cual rompecabezas 299% para que pases un buen rato. Un
solo tema me gusta menos que los demás, pero no es un tema flojo es un tema
más. Es el disco más bonito (después del 1# obvio) de este año y perfecto para
el verano, invierno, otoño, primavera o cualquier día en que sea necesario un
envión.
Momentos Embolantes:
No hay si el disco se pasa entero. El único tema que me gusta menos no lo voy a
nombrar.
Momentos Épicos: El
tema que da nombre al disco es espectacular, un viaje a algún lado del corazón,
o algún lado de la memoria, o algún lado de algo es un viaje al fin y al cabo,
que importa a dónde. “Leaves Like Glass” es perfecta y “Full Moon” es
necesaria.
1. J MASCIS – TIED TO
A STAR
“Ah, vos sos de los que predican Ty Segall, discúlpame pero
en esta casa nos alcanza y sobra con J Mascis, nuestro gurú”
Este disco es hermoso. J es un tipo del que no se puede
estar al margen. Desde que se reactivó con el regreso de Dinosaur Jr. (la única
banda que en mi cerebro puede pelear el podio junto a los Ramones) J ha estado
mejorando disco tras disco, o como digo yo haciendo lo único que sabe hacer,
que siempre ha sido bueno y sólo hace falta que nos lo haga notar. El anterior
disco de J en solitario era un gran disco pero quizá sobrio en comparación con
los discos nuevos de Dinosaur Jr. Y por lo tanto quedó un poco en segundo plano
al lado de estos. Entonces, con un parate en su banda madre, J aprovechó el
momento y sacó esto.
Para ponerlos en contexto es como si el tipo hubiese bajado
de la montaña sagrada en dónde vive a tocar la guitarra en algún paramo
olvidado con tres o cuatro personas, a medida que avanzaba la voz se corrió al
pueblo y todos fueron a verlo; hacia el final de su actuación el lugar estaba
repleto y cuando terminó todo el mundo lo aplaudió de pie y se fue a su casa,
él limpio el lugar, acomodó las cosas, se echó un meo y volvió a subir la
montaña a pata. Creo que esa es la mejor manera de representar un poco la
leyenda que supone J.
Para explicar por qué creo que este es el mejor disco de
este año (a pesar del de Woods) debería citar el disco en cuestión, tema por
tema. El álbum comienza con “Me Again” que es la manera en la J nos recuerda a
todos cuánto le gusta tocar la guitarra esté donde esté y cómo toca los
acústicos a pesar de que es mayormente conocido por ser el “Ear Bleeding King”.
Es un tema tranqui (todos los temas lo son) que sirve como preludio perfecto
para lo que sigue. “Every Morning” es sin duda el hit de este disco y es un
tema que nos recuerda al J de “Take a Run at the Sun”. Es el tema ideal para
empezar las mañanas (con mi hermano siempre decimos lo mismo) y que sea una
mañana genial. “Heal a Star” nos muestra
un poco como va a seguir la cosa de acá en más. Melancólica y hermosa tiene un
cierre muy bonito, que por cierto se acopla perfecto a lo que sigue que es otro
punto álgido del disco “Wide Awake” en la que colabora Cat Power y en la que
los susurros van de la mano de la guitarra de J, que a esta altura ya es como
la extensión de su mano. En “Stumble” comienza a aparecer la vieja amiga de J,
la guitarra eléctrica que de acá en más se acopla perfecto a su hermana
acústica. En “And Then” se nota más, y ahí es en dónde aparece el primer solo,
chiquitito. “Drifter” es la pausa acústica que te va preparando a lo que viene,
estás disfrutando esto pero se está acabando. En “Trailing Off” la cosa se pone
más interesante a cada segundo y no podes evitar la piel de gallina cuando hace
acto de aparición ese solo. “Come Down” deja de lado la guitarra eléctrica y es
como volver al inicio, es larga y casi ni se nota que es la penúltima canción
del disco, buen truco. Pero llega “Better Plane” y todos nos damos cuenta de
que esto termina así, con ese solo que en su clímax ya nos tiene a todos
paraditos con la vela en la mano.
Es así, ese Mr. Natural que es J Mascis ha hecho acto de
aparición y ahora se va. Vuelve a tu montaña santo gurú, tus fieles seguiremos
acá cuando quieras regresar.
